¡Sí, señores! Después de nueve meses de embarazo, hemos dado a luz al blog "Marcha Atrás". Este proyecto nace a fines de 2009, a partir de un grupo de amigos, estudiantes de Historia en la UBA.
Lo que nos impulsa a llevar adelante esto son algunas de las cosas que observamos. En primer lugar, en esta última década podemos ver un "boom histórico", con muchos libros de temas históricos entre los primeros en ventas y programas de TV temáticos en horarios centrales. Esto responde a la necesidad de los argentinos de replantearnos el camino frente a una crisis de un modelo económico y político. El interés en la historia argentina representó una opción frente a este incierto futuro que se asomaba, buscando en el pasado alguna respuesta a las penurias del presente.
A pesar de este clima social favorable a la difusión de nuestra disciplina, vemos que no ha sido aprovechado todo lo que podría haber sido. Por un lado, tenemos el éxito de Felipe Pigna. Sin duda es quién mejor resultado logró al buscar acercar la historia al gran público. Sin embargo, su planteo revisionista de la historia, oculta a muchos revisionistas anteriores a él. Además, cae en algo muy parecido a lo que él se opone: la historia oficial de próceres que nos enseñaron en la escuela primaria. Lo que hace Pigna es invertir esta historia de grandes hombres y plantear que en la historia argentina todos los que "perdieron" son buenos y los malos son los que vencieron y, por lo tanto, escribieron la historia. O sea que no resulta una verdaderamente nueva historia, sino que es algo muy similar con diferente signo; sin intentar hacer una historia basada en procesos sociales en lugar de hombres. Casi una mitología.
Esta crítica es muy similar a la que pueden hacerle a Pigna los historiadores del ámbito académico. Sin embargo, las voces de la "Academia" sólo se alzaron para criticar y no para proponer una alternativa de divulgación. No hay un verdadero interés de acercar los debates y las investigaciones que se elaboran a un público más masivo. Asique la producción de conocimiento permanece "puertas adentro" sin satisfacer la necesidad del pueblo de conocer su historia. La oportunidad de llevar una historia procesual y de calidad ha sido, en gran parte, desaprovechada. Salvo la excepción de Canal Encuentro, donde han encontrado (¡valga la redundancia!) un canal (¡doble redundancia!) para transmitir parte de esta producción, que aunque pueda ser criticada, al menos es un puntapíe inicial. Lamentablemente, la ocasión del Bicentenario tampoco ha sido oportunamente aprovechada para plantear un debate interesante, ni siquiera en el interior de la Universidad.
A partir de estas deficiencias, es que nosotros nos planteamos llevar el conocimiento que adquirimos y producimos en la facultad, y ponerlo al acceso de quienes no forman parte de este espacio. Espero que les pueda resultar interesante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario